lunes, 16 de julio de 2012

El Anarquismo latinoamericano y la lucha revolucionaria de los 60, 70 y 80


A continuación extractos de diferentes fuentes sobre el accionar del Anarquismo durante las décadas del 60, 70 y 80 en latinoamerica. El correspondiente a Uruguay fue extraído de nodo50.org/fau

Uruguay
De nodo50.org/fau
La historia de FAU se vincula con otra historia: la del anarquismo en el Uruguay que arranca ya desde la década de 1870. Es el anarquismo fundador de la mayoría de los primeros sindicatos; su prensa es quien difunde las nuevas ideas socialistas y libertarias en nuestro país; es fundador de la primera Federación obrera; sus ideas y prácticas revolucionarias dejan una impronta en la historia del movimiento popular donde algunos de sus rasgos perduran hasta nuestros días.
Precede a la FAU esta historia y lo que hay concretamente de expresión libertaria en la década del 50: presencia en sectores obreros y estudiantiles. Habla de ello la lucha antifascista y tercerista en el medio universitario, una serie de conflictos obreros con incidencia de acción directa y poco más adelante la lucha de los gremios solidarios de 1951-52.
La FAU es fundada en octubre de 1956 y en ella confluyen militantes sindicales, barriales, así como sectores juveniles y estudiantiles agrupados en las Juventudes Libertarias, también algunos militantes españoles refugiados aquí. 
La nueva Organización, como intento de organizar políticamente a los anarquistas uruguayos, debe actuar en un país y en un continente que comienza a verse sacudido por la crisis y por la profundización de la lucha popular, y donde la injerencia imperialista, especialmente la de Estados Unidos, se hace cada vez mayor y enfrenta crecientes resistencias. Está la reciente instrumentación yanqui del golpe de estado contra los planes de reforma en Guatemala. Son también los años de la "guerra fría", de la invasión a Hungría por las tropas rusas, de la intervención franco-anglo-israelí como respuesta a la nacionalización del Canal de Suez y de las triunfantes guerras de liberación contra el colonialismo en Africa y Asia.
La FAU se desarrollará anclada en la tradición revolucionaria bakuninista, en las posiciones organicistas que tuviera Malatesta uno de sus portadores más reconocidos, en experiencias y epopeyas de la Revolución Española, de cierta influencia clasista del anarcosindicalismo y tomando la tradición de los métodos de acción directa. Al mismo tiempo, la Organización y sus militantes son conscientes de que su actividad se debe desarrollar en un continente y en un país con las características específicas de lo que comienza a ser llamado Tercer Mundo. Nuestra militancia tiene presente el momento histórico, el nuevo contexto en el que debe desarrollar su acción, la necesidad que ello conlleva de ubicar los problemas de este tiempo, con cabeza propia, para operar en consecuencia.
Va estudiando temas, desarrollando su accionar, sorteando dificultades, teniendo aciertos y errores en esa fluida lucha social que un momento histórico revuelto plantea. Una obsesión lo empuja: poner en escena una propuesta y una ideología que considera totalmente vigente. Vendrán dificultades internas que serán rápidamente superadas y que no impiden la continuidad de la estrategia libertaria diseñada.
Para la burguesía un modelo de país entra en crisis y se intentará el reacomodo suprimiendo derechos y conquistas obreras y populares. La represión se intensificará y será en tal coyuntura un instrumento principal de la estructura dominante para efectivizar el modelo que le permita seguir adelante con sus brutales privilegios. Desde el poder, un giro hacia la derecha intenta avanzar a fondo. Los enfrentamientos populares a la regresión y represión se hacen frecuentes. Frente a la situación que se vive cree la Organización necesaria la adopción de formas organizativas que le permitan llevar adelante las diversas actividades que encara: públicas algunas y también semiclandestinas o clandestinas otras. Un Decreto del gobierno declara ilegal a la FAU, junto a otras organizaciones, a fines de 1967. Esto no toma de sorpresa a la Organización y puede entonces continuar el conjunto de sus acciones, incluso aumentar su crecimiento.
Mantuvo entonces una actividad regular y en aumento su incidencia político-social hasta el momento mismo de la llegada de la dictadura. Desde 1964 en adelante su coherencia y eficacia resultó mucho mayor. Fue creadora y dinamizadora de frentes de trabajo que lograron presencia y peso a nivel nacional, fundamentalmente a nivel de su capital. Participó activamente en la fundación de la CNT. Coordinó internamente y con otras fuerzas su participación en el importante Congreso del Pueblo. Hizo el llamamiento para la creación de la Tendencia Combativa. Integró el Coordinador, organismo con preferencia de lucha armada, con organizaciones como MLN, MIR y otros.
Participó, junto a otras fuerzas políticas, en un diario de cierta relevancia: "Epoca", que expresaba a la izquierda de tono combativo. Jugó FAU parte activa en la elaboración de un documento que permitiera una acción conjunta, en importantes zonas estratégicas, a estas fuerzas que integraban el diario.
Sufrió diversos golpes, compañeros presos y torturados, la propia organización legalmente perseguida durante casi cuatro años. Hasta 1971 la FAU realizó su actividad desde una situación de clandestinidad. En este periodo algunos de sus locales clandestinos cayeron y algunos de sus militantes tuvieron que actuar totalmente en la clandestinidad pues aparecían públicamente requeridos. Por momentos tuvo a más de la mitad de su Junta Federal detenida en cuarteles.
La FAU que ya había logrado desarrollar formas organizativas y de actividad que le permitieron mantener su funcionamiento, ya sea en los distintos sindicatos donde nuestros militantes actúan, en los organismos de dirección de la CNT, en el movimiento estudiantil, en tareas políticas, de acción directa armada, en la lucha ideológica contra el reformismo y el colaboracionismo obrero, fundamentalmente expresado por el Partido Comunista. Logra sacar y distribuir su prensa semanalmente durante todo el tiempo de clandestinidad: "Cartas de FAU". También en condiciones de clandestinidad realiza eventos internos consultivos y resolutivos, incluso de cambio en su Junta Nacional. De no menos importancia es la discusión y acuerdos puntuales con otras fuerzas revolucionarias; manteniendo nuestra independencia ideológica y política. Es de destacar que en este periodo, la Organización tiene un importante crecimiento. En 1968, ya en la clandestinidad, después de una decisión orgánica que previamente realiza evaluaciones estratégicas, a iniciativa de nuestro militantes, distintos grupos obreros y estudiantiles dan vida a la ROE (Resistencia Obrero-Estudiantil) que actuará con amplitud pero también como frente externo y de masas de la proscripta FAU. En la ROE actúan militantes de FAU con distinto grado de responsabilidad en la dirección de los sindicatos tales como industria del caucho, gráficos, bancarios, del gas, puerto, industria metalúrgica, textiles, industria química, refinerías de petróleo, transporte, sanidad, industria alimenticia, ferrocarriles, empleados de la Universidad, etc. Los estudiantes son fuertes fundamentalmente en el Instituto de Magisterio, entre los estudiantes de Enseñanza Secundaria, pero débiles en la Universidad donde sólo están presentes en pocas Facultades (Humanidades y Medicina).
El peso de la Organización en el movimiento obrero y popular reviste importancia. Marca una línea de trabajo combativo y cuestionador del sistema. Fue puntal del trabajo de Tendencia que nucleara a los partidarios de formas de trabajo no burocráticas, participativas y movilizadoras. No descuidó la polémica con el reformismo, fundamentando permanentemente el porqué? de su accionar político distinto.  Paralelamente a la actividad de masas, a determinada altura, actuará la OPR (Organizaci¢n Popular Revolucionaria), aparato armado de la FAU que llevará adelante con bastante éxito una serie de acciones (sabotajes, expropiaciones económicas, secuestros de dirigentes políticos y patronales particularmente odiados por el pueblo, apoyatura armada a huelgas y ocupaciones de fábricas, etc.). La FAU inserta su acción armada en una óptica política e ideológica muy distinta de la de la mayoría de los movimientos de liberación latinoamericanos, en gran medida influenciados por el castrismo cubano y los teóricos del "foco guerrillero". El accionar de la FAU a través de la OPR tiene más bien algún parentesco con el de los compañeros de los grupos armados españoles vinculados a la FAI (Federación Anarquista Ibérica) de la década de los 20-30. Claro está que acusando recibo adecuado del contexto histórico que debe enfrentar y de la articulación global que deben tener sus distintas instancias militantes.
Se establece para el aparato armado sólo autonomía táctica, todos los operativos político-sociales son resueltos por la instancia política global. Se estima que su desarrollo y el tipo de violencia que ejecute deben guardar relación con el desarrollo de la lucha global del movimiento obrero-popular en el país.
Se procura evitar niveles de violencia que queden fuera de contexto y aislen. Al mismo tiempo se toman una serie de medidas de funcionamiento para prever y con miras a evitar deformaciones "militaristas". Combatir toda cultura de obediencia. El país sufre una profunda crisis económica y política, la "clase política" no da repuesta a los problemas urgentes que el mantenimiento del sistema plantea. Hay en el país ya instalada una dictadura constitucional. El movimiento obrero-popular responde ante el quite de libertades y derechos. Organizaciones de combate marcan cierta presencia. Es todo un periodo de fuerte represión y enfrentamientos sindicales y populares. Entra el Ejército en escena y hegemoniza la represión. En diferentes lugares, también en el Parlamento, hay denuncias de brutales torturas en los cuarteles. Las llamadas "Fuerzas Conjuntas" (Ejército y policía) suman a su labor de represión física una labor de tipo ideológico, tratan de difundir confusión y miedo a través de comunicados puestos en los distintos medios de comunicación que utiliza.
En dos o tres meses la represión prácticamente desmantela el MLN (Tupamaros). En un marco inseguro y de descenso de las luchas, con inminente amenaza de dictadura, la Organización evalúa la situación y considera necesario replegar parte de su fuerza. Hay en ese momento una treintena de compañeros en condiciones de clandestinidad. Los compañeros de OPR se cuentan entre los primeros que la organización evacúa. Ellos se encargarán en lo inmediato, en la Argentina, de lograr los medios económicos para una lucha contra la dictadura que se prevé larga. Se estima que la Organización debe tomar las medidas pertinentes que permitan durar en el tiempo. "Durar haciendo, durar luchando" se dirá por ese entonces. En Junio de 1973 con la implantación de la dictadura militar, se completa el proceso de tiranización del país en un continente marcado por la presencia de dictaduras militares en Brasil, Chile, Bolivia, Paraguay, etc. Ya en ese momento centenares de presos políticos pueblan las cárceles de Uruguay, la mayoría de las organizaciones revolucionarias han sido diezmadas. La FAU vuelca todos sus esfuerzos en la huelga general que durante quince días paralizará el país. Debe redoblar esfuerzos ya que la fuerza mayoritaria, el PC, repliega, en ese momento, gran parte de su fuerza militante y procura determinado diálogo con los militares. La huelga general sobrevive en la memoria de los trabajadores uruguayos como ejemplo de su decisión de lucha.
En estas condiciones, la FAU ordena ahora la evacuación de la mayoría de sus militantes hacia Buenos Aires, donde ya se encuentran los "más quemados", parte de la Junta Federal y los compañeros de la OPR, con la intención de iniciar desde ahí las tareas políticas que impone la resitencia contra la dictadura. En parte del año 73 y durante 74 y 75 la Organización desarrolla una importante labor desde la Argentina. Apuntalando el trabajo en Uruguay, logrando los medios materiales necesarios para sostener una larga resistencia. Militantes en Uruguay y militantes en el exilio ven a la Organización como una expectativa real. Comienza en ella en estos años un proceso hacia una apertura política que de cabida a mucha militancia que no procede del anarquismo. Un Congreso definirá una posición que apunta a tal objetivo. De cualquier manera se mantiene una estrategia de intención revolucionaria, antielectoralista y de matriz libertaria. Pero la situación Argentina se deteriora rápidamente. En setiembre de 1976 los militares toman el poder e instauran allí una brutal y genocida dictadura. Acorralados por la represión de los servicios especiales del ejército argentino y del uruguayo, operando el Plan Cóndor, una cincuentena de compañeros son asesinados y "desaparecidos", luego de soportar indescriptibles torturas, otros tantos son condenados a largos años de prisión. Dentro de los asesinados se encuentran compañeros viejos de decisiva gravitación para el accionar del conjunto de la organización, por ejemplo Gerardo Gatti, León Duarte, Alberto Mechoso. Compañeros de formación intelectual y emotiva anarquista. El gran golpe sufrido genera dispersión, confusión y sensación de derrota. Una gran pérdida humana y militante que dejará profundas huellas en esta historia. La FAU, llevando en sus entrañas aquel periodo de lucha y en el mejor de los recuerdos a aquellos compañeros caídos seguirá el derrotero libertario hasta nuestros días.
Además de la existencia de FAU-OPR33, otro grupo de libertarios decidieron fundar el Partido Por la Victoria del Pueblo –PVP- así como también sumarse al Movimiento 26 de Marzo del MLN-Tupamaros.




Argentina
A continuación extracto de la Introducción de Chuck Morse a entrevista a Fernando Lopez Trujillo, 13 de octubre de 2002. Traducida del inglés al español por Frank Mintz.

La confluencia mas conocida de grupos libertarios fue Resistencia Anticapitalista Libertaria, donde se fusionaron grupos como Línea Anarco Comunista, Grupo Anarquista Revolucionario, Acción Directa, Organización Anarquista y Resistencia Libertaria La Plata. “Resistencia Libertaria (RL) era activa en los movimientos estudiantil, laboral y barrial y también tenía un ala militar con la que defendió y financió sus actividades. En su mejor momento, tenía entre 100 y 130 miembros y una red mucho mayor de simpatizantes. La organización fue diezmada en 1978 y el 80 % de sus miembros pereció en los campos de concentración y las cámaras de tortura de la dictadura.”




Chile
En este país se pudo desarrollar la experiencia de autodefensa de pobladores conocida como Brigadas del Pueblo conformada por militantes libertarios a fines de los `70. También se pudo conocer la participación de anarquistas en la Vanguardia Organizada del Pueblo y el MIR a fines de los `60.




Brasil
A fines de los 60 la dictadura brasilera logró perseguir y encarcelar a militantes del Movimento Estudantil Libertário quienes ya habían empezado a practicar una alternativa revolucionaria como resistencia. Por otro lado hacia fines de los 70 podemos mencionar a los grupos en torno al periódico “O Inimigo do Rei”, actuantes en São Paulo, Bahia, Río de Janeiro y Rio Grande do Sul.




Perú
Extraído de "Historia del MRTA", periódico Voz Rebelde, nadir.org/nadir/initiativ/mrta/

Durante la génesis del Movimiento Revolucionario Túpac Amaru (MRTA) podemos encontrar participación de posiciones y tendencias anarquistas. Como se detalla en el texto de la Comisión Política del MRTA, hacia 1982 cuando se estaban definiendo las estrategias revolucionarias que se iban a utilizar, se expresaron “marcadas reminiscencias anarquistas que pretendía (…) un golpe de mano liderado por dirigentes gremiales”. Así mismo dirigentes del MRTA como Néstor Cerpa Cartolini y Miguel Rincón Rincón reconocían influencias del anarquismo en sus pensamientos.




Colombia
Llegados los años ochenta, en Colombia muchos libertarios deciden entrar a formar parte de las distintas guerrillas, principalmente el ELN, donde ingresa la organización anarquista Antorcha Libertaria. Aunque en mucha menor medida también algunos libertarios se unieron a las FARC o al M19. Además podemos destacar la lucha del Comité Regional Indígena del Cauca (CRIC) de pueblos originarios Nasas, quienes mantienen durante todos los `80 una insurgencia armada en el valle de Cauca a través de su organización Movimiento Armado Quintín Lame. Habiendo abandonado las armas a principios de los `90 actualmente estos pueblos se organizaron en asambleas autogestionadas y federales denominadas Asociación de Cabildos Indígenas del Norte del Cauca.


No hay comentarios:

Publicar un comentario